Fortecem es una empresa 100% colombiana, conocida por ser amigable con el medio ambiente y tener una economía circular dentro de su proceso de producción. Como se contempla en su visión “somos una Molienda con capacidad de ofrecer soluciones para los sectores de la construcción, generando valor económico, social y ambiental” es por esto por lo que seguimos creciendo y haciendo productos que hagan buenas obras, como lo es el cemento mampostero, una solución pensada para ofrecer calidad, eficiencia y sostenibilidad en cada obra.
El cemento mampostero es un material ampliamente utilizado en el ámbito de la construcción, especialmente en trabajos de albañilería y acabados. A diferencia del cemento
de uso general, que se emplea principalmente en estructuras de concreto reforzado, el cemento mampostero está diseñado específicamente para trabajar con elementos de
mampostería como ladrillos, bloques de concreto, piedras y otros materiales similares.
Uno de los principales beneficios del cemento mampostero es su excelente trabajabilidad, es decir, su facilidad para ser manipulado y aplicado en obra, el mortero resultante tiene una consistencia plástica y suave que permite una distribución uniforme, una buena adherencia a las superficies y un acabado más limpio. Además, esta característica reduce el esfuerzo físico del operario y permite realizar juntas más delgadas, estéticas y duraderas.
Otra ventaja es su capacidad para absorber pequeñas deformaciones y movimientos sin
agrietarse con facilidad, lo que es fundamental en construcciones de mampostería que no
están sometidas a cargas estructurales elevadas. Además, el cemento mampostero presenta una buena resistencia a la humedad, lo cual es esencial para garantizar la durabilidad de muros exteriores y revestimientos expuestos a la intemperie. su desempeño es más que suficiente para los usos previstos, y su durabilidad puede extenderse por décadas si se aplica correctamente.
El uso de este tipo de cemento también mejora la eficiencia en obra, ya que permite un fraguado más controlado y una mayor adherencia entre los elementos de construcción,
reduciendo la posibilidad de desprendimientos o filtraciones. Esto es particularmente importante en zonas donde las condiciones climáticas pueden afectar la calidad del trabajo final. En términos de sostenibilidad reducimos la huella de carbono del producto. En
resumen, el cemento mampostero representa una solución práctica, eficiente y duradera para una amplia gama de aplicaciones en la construcción tradicional, destacándose por su versatilidad, facilidad de uso y buen comportamiento frente a las condiciones ambientales.